
Hay alimentos que no deben pasar por este electrodoméstico ya que produce cambios en el sabor, textura y hasta puede haber intoxicación.
Con la vorágine de la vida cotidiana, cada vez hay menos tiempo para cocinar, por lo que los electrodomésticos se convirtieron en los grandes aliados a la hora de preparar y calentar las comidas. En este sentido, el microondas uno de los más elegidos ya que permite calentar, descongelar y cocinar productos de manera rápida y eficiente.
Pero antes de utilizarlo, hay que tener en cuenta que hay ciertas comidas que no están permitidas o que requieren precauciones específicas para evitar problemas de salud y seguridad.
Qué comidas no se pueden recalentar en el microondas
Según explican los expertos de Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), hay comidas que son recomendables para recalentar en el microondas por el riesgo que conllevan:
Un huevo con cáscara: puede explotar debido a la acumulación de vapor en su interior. Es recomendable hacerlo sin la cáscara o hervirlo.
Verduras de hojas verdes: podrían producir chispas si se calientan en seco.
Salsas de tomate: al recalentarse mucho, comienzan a explotar y ensuciar el microondas debido a su espesor.
Uvas: pueden producir chispas y fuego, creando un plasma brillante.
Bolsas de semillas: existe el peligro de sobrecalentarse o incendiarse si no se siguen las instrucciones al pie de la letra.
Además, según un estudio de la American Journal of Epidemiology, calentar carne algo cruda en el microondas puede causar diferentes problemas de salud. Por ello, lo mejor es procurar cocinar bien la carne mediante otros métodos, como puede ser una sartén y luego recalentarla si se quiere.
Los seis lugares donde nunca se debe conectar un microondas
Cerca de otros electrodomésticos grandes: la proximidad a heladeras, lavavajillas o estufas puede interferir con el rendimiento del microondas y afectar su vida útil.
Debajo de armarios o estanterías bajas: la falta de espacio libre sobre el microondas dificulta la ventilación adecuada y puede causar sobrecalentamiento.
Espacios muy reducidos: colocar el microondas en áreas demasiado estrechas o encerradas puede impedir una ventilación adecuada.
Áreas húmedas: ubicarlo cerca de la bacha o en áreas propensas a derrames de líquidos puede dañar los circuitos electrónicos debido a la humedad excesiva.
Cerca de dispositivos electrónicos sensibles: la proximidad a televisores, equipos de música o computadoras puede interferir con su funcionamiento por interferencias electromagnéticas.
Sobre las hornallas: el calor y el vapor generados al cocinar pueden afectar el rendimiento del microondas y acortar su vida útil.
Además, según explica la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos), hay cuatro recomendaciones de seguridad para no tener problemas con tu microondas:
-Utilizar recipientes aptos, evitando metal y ciertos plásticos.
-Evitar calentar agua más allá de su punto de ebullición para prevenir explosiones.
-Comprobar si el microondas tiene fugas de radiación.
-No usar un microondas que funcione con la puerta abierta.
Qué pasa si el microondas hace chispas
En caso de que el microondas haga chispas, los especialistas de la Casa del Electrodoméstico afirman que puede ser por haber incluido algo de metal o aluminio a recalentar dentro, lo que va en contra de su funcionamiento habitual.