Cerraron la causa por el asesinato de Matías Rosales

El asesinato del joven músico Matías Rosales, que encontró la muerte en Oruro de manera violenta, podría quedar impune, a pesar de la lucha que llevó adelante la madre y la pareja del músico y artesano (una joven de Catriel).
Sin embargo, la familia no se rinde, presentando un recurso de objeción ante la justicia boliviana que archivó la causa el 15 de abril, sin completar la investigación, dado que nunca se avanzó en la búsqueda de un colombiano quien sería el que asestó una puñalada que terminó con la vida de Matías. Tampoco se dio aviso al consulado o a la familia de la decisión tomada a pedido del fiscal que intervenía en el caso.
A pesar de las pruebas que pudieron aportar a la causa, sostienen que nunca se realizó el identikit de quien sería el asesino, ni tampoco se dispuso un control de fronteras inmediato que impidiera salir del país al homicida, utilizando un paso legal o ilegal, dado que sólo hay 20 minutos de trayecto para llegar a la aduana. Se contaba además con un video que graficaba los minutos previos al ataque sufrido por el neuquino, que además no fue atendido con la premura necesaria por el sistema de salud de ese país, presumiblemente por ser argentino.
Según pudo saberse, la familia presentó el reclamo ante el ministerio de Justicia de Bolivia, en La Paz, con la esperanza de que la investigación se reanude y se pueda dar con el paradero del presunto asesino, según puede verse en las pruebas conque cuentan, pero que no fueron incorporadas a la investigación.
Días posteriores al hecho, el consulado argentino emitió un comunicado indicando «por el momento resulta necesario ser cautos en el caso de que el ciudadano argentino no haya sido asistido en tiempo y forma al momento del hecho, con lo cual es necesario aguardar que se verifiquen diversos extremos en materia probatoria».
La pareja del músico denunció que Matías no recibió asistencia médica oportuna, que lo dejaron en la puerta del hospital, y desde allí fue trasladado directo a la morgue.
El joven era muy conocido en la región, especialmente en Neuquén, en el barrio Confluencia donde colaboraba con clases de música.